RESEÑA SOBRE OLIBORIO MATEO

EN LA PUESTA EN CIRCULACION DEL LIBRO “LIBORIO ENTRE FLORES Y FUEGO”
DE EDGAR HERNANDEZ MEJIA

Por: Sobieski De León Lazala

SALON DE ACTOS DEL HONORABLE AYUNTAMIENTO
MUNICIPAL, DE SAN JUAN DE LA MAGUANA

24 DE JUNIO, 2006


Oliborio Mateo, es un personaje histórico vivo que ha despertado un verdadero interés investigativo porque lo que habíamos aprendido sobre él hasta ahora nos había llegado incompleto.

Con la “Jornada La Ruta Hacia Liborio”, realizada en junio del 2002, emprendida por la Secretaria de Cultura y apoyada por la UNESCO, organización mundial para la Educación, la Ciencia y la Cultura, se inicia oficialmente la vindicación o recuperación de la verdad histórica sobre Oliborio Mateo.

Debemos preguntarnos siempre en San Juan de la Maguana, en nuestra patria, y aún a nivel mundial, quién fue Oliborio Mateo.

Quién lo da a conocer a las futuras generaciones es un sanjuanero llamado Emigdio Osvaldo Garrido Puello, alias “Badín”, maestro-educador, periodista, impresor, director y propietario del periódico “El Cable”, y empresario que compra y vende productos procedentes de Haití.

El, es el autor de la imagen distorsionada y la denigrante memoria que sobre este líder campesino tuvieron las sucesivas generaciones sanjuaneras y el resto del país.

Para Garrido Puello, Liborio, es “un brujo, un curandero, una persona que se creía un Dios”; despectivamente lo llama “Dios espurio y barrigón, creador de una religión popular que usaba a los campesinos para sus fines particulares”. Lo acusa de “gustarle empinar el codo”, es decir de alcohólico, y a la religión creada por él, de “predicar el amor libre”. Creía que Liborio, era un impostor, un alucinado, un demente que se creía enviado de Dios. Por otra parte, las familias oligárquicas sanjuaneras, los patrones de la élite dirigente concluía que:

“Liborio, era un ignorante que dirigía a otros más ignorantes que él: los campesinos”

Como podemos ver, hay un claro sello de lucha de clases: Por un lado la clase rica propietaria, con sus esquemas ideológicos de dominación, y por el otro, la clase pobre obrera-campesina, creadora de las riquezas con su trabajo, depositaria en cambio de la miseria y la denigración humana. Lucha dialéctica de iguales y contrarios.

Al margen de lo que pudiera haber dicho Badín Garrido Puello, Oliborio Mateo, fue el líder de un gran movimiento mesiánico que se inició en La Maguana, y se extendió a toda la región y el país.
Liborio, fue un mesías, un enviado de Dios, según sus propias palabras; el tiempo y su obra lo establecieron en la conciencia campesina y popular como:

“Papá-Liborio”, “El Maestro”,

“El Profeta de La Maguana”, el

“Segundo Dios, o Dios Liborio”,

“San Liborio Mateo”; es lo que percibió y permanentemente resucita la gente buena y sencilla, los humildes, los mansos, los soñadores de un mundo mejor y de paz, los que buscan una esperanza para todos.

Oliborio Mateo, fue un personaje real de carne y hueso como cada uno de nosotros.

Nació en 1878; tuvo padre y madre, esposa, hijos. Habló con Dios, como hablan todos los profetas. ¿No habló acaso, Moisés, con una zarza ardiente, que según él, era Dios?

¿No recibió dos tablas con leyes para cumplir de las mismas manos de Dios? De haber vivido en la época de Moisés, Badín Garrido Puello, hubiera dicho que era un demente, un alucinado, un impostor, como lo dijo de Oliborio Mateo.

Oliborio Mateo, como los profetas, tuvo un gran sueño. Soñó que subió al cielo llevado
por el ángel Gabriel, montado en un caballo alado; que habló con Dios, quien le ordeñó “regresar a la tierra a curar enfermos y a predicar”; esa fue su misión. Al despertar nació Liborio, el profeta de La Maguana.

Hay una relación coincidente entre Liborio y Jesús. El profeta San Juan Bautista, anuncia un mesías en Palestina, a Jesús de Nazareth. También en nuestra geografía sanjuanera quien precede a Oliborio Mateo, como anunciándolo, es el mismo San Juan Bautista.

Anterior a la aparición del profeta de La Maguana, la fuente de agua en plena Cordillera
Central, recibió el nombre de Fuente de San Juan Bautista, pues según la tradición ahí apareció el Santo. Con el tiempo la Fuente de San Juan Bautista, se convierte en La Aguita de Liborio.

Aquí empieza su misión el Profeta de La Maguana. Bien pronto la fama de curador de enfermos se riega en la comarca al curar a una muchacha paralítica con sus palabras de sanación “entre el bien y salga el mal”.

Su ministerio despierta admiración, envidia y recelos.

Pero Oliborio Mateo, ha hecho también amigos en San Juan de la Maguana, y tiene relaciones con personajes importantes de la vida social y política de la ciudad. Los generales Wenceslao Ramírez (¡Papá-Nelao!) y su hijo José del Carmen Ramírez Carrasco
(¡Carmito Ramírez!), son los dos más impotantes.

Liborio, se ha hecho líder campesino y guía espiritual en una época de grandes inestabilidades políticas; es el tiempo de la montonera y las tierras comunales; el tiempo en que
la propiedad de la tierra es de todos y de nadie; época del convite y la hermandad; de compartir lo que se tiene entre todos. Y es a la vez, el tiempo calamitoso en que se desborda la ambición imperial de los Estados Unidos de Norteamérica. Los yankees han decidido apoderarse de nuestras tierras. Necesitan tierras para expandir su naciente industria azucarera. Y lo hacen con tierras ajenas: Puerto Rico, Las Bahamas, Filipinas, Cuba, Santo Domingo, caen víctimas de sus maquinaciones. Los campesinos son arrojados de su paraíso terrenal, de sus tierras. La South Puerto Rico Sugar Company, se apodera de las tierras del Este; la Barahona Company, se apodera de las tierras del Sur.

Barahona, Neyba, Azua, San Juan, son sumidos en la miseria; los campesinos pasan más hambre y calamidades que nunca. ¡Pero Liborio, está ahí! Está con ellos y los dirije a una lucha de resistencia contra el yankee invasor. Hay expresiones anti-yankee en las salves y cantos liboristas; hay testimonios anti-norteamericanos de sobrevivientes liboristas a la invasión y establecimiento de un Gobierno Militar Extranjero en 1916.

Entonces, el Gobernador Militar Yankee de ocupación, ordena al Coronel Bears, ir a San Juan, y “traer vivo o muerto, a ese tal Liborio”. Ahí mismo nace el José Oliborio Mateo, Curandero-Guerrillero, de Salvinia Caminero.

EPILOGO: Oliborio Mateo, fue el Profeta de La Maguana, mesías de los campesinos de su pueblo, anunciador de buenas nuevas para ellos, sostenedor de su esperanza, curador de sus enfermedades, guía espiritual y conductor con su prédica de amor y paz hacia un mundo mejor, líder auténtico campesino en la resistencia contra los invasores norteamericanos de 1916, Santo, martirizado el 27 de Junio de 1922, en la misma Hoya del Infierno. Crucificado en una yagua por los americanos y los vende patria dominicanos; paseado por la ciudad como escarmiento y expuesto en la Plaza Pública.

Pero resucitado para su pueblo al día siguiente de su muerte como el otro mesías resu
citó al tercer día de entre los muertos, para sostener la verdad que la gente pregona sin cesar, aún a 84 años de su último combate:

“¡LIBORIO, NO HA MUERTO NA!”
“!LIBORIO, NO COME PENDEJA!”

(San Juan de la Maguana, 24, Junio,2006).-